Fecha: 10/09/2025
Empezamos el curso con la obre: «LIBRE. El desafío de crecer en el fin de la historia, de LEA YPI» (Tirana 1979)
En este tórrido verano de 2025 he leído esta interesante novela en la que su autora nos narra parte de su infancia y adolescencia enlazada con la reciente historia de su país, Albania.
Este país fue el último reducto comunista tras la caída del Muro de Berlín (1989). En la primera parte, Lea recuerda especialmente sus años de escuela, donde las maestras adoctrinaban en el culto a Enver Hoxha, enseñando canciones en las que se ensalzaban sus innumerables virtudes. Pero Lea no veía en su familia ese entusiasmo, nunca se terminaba de colgar el cuadro de tío Enver, cómo llamaban al dictador. Ella trata de indagar en sus raíces, en su propia biografía y a la vez entender la historia de su país. Su abuela es una figura fundamental en estos años de transición entre niñez y adolescencia.
Ypi crece en un entorno cambiante, precario e hipercontrolado: el racionamiento, las colas para acceder a los productos básicos, el control gubernamental celoso en la filtración de información respecto a lo que pasara más allá de sus fronteras, la falta de libertad religiosa. Nos hace una crónica histórica con todo detalle sin entrar en valoraciones políticas o morales, con sencillez, desde su vida cotidiana, sus relaciones familiares y vecinales, su colegio, las colas para comprar lo poco que se puede…de los últimos años bajo el régimen comunista así como la posterior caída del país —a la desaparición de Hoxha— en el mercado libre y en un liberalismo global desenfrenado que ocasiona la huida masiva de la población por el paro y la guerra civil.
Uno de los relatos más inolvidables del libro es una discusión que los padres de Lea mantienen con unos vecinos por el robo de una lata de Coca-Cola vacía. Es por cierto, la referencia que podemos ver en el diseño elegido para la portada de la edición de Anagrama. La madre de Ypi consigue reunir algo de dinero para hacerse con una, el racionamiento era atroz y cualquier producto extranjero era considerado como un lujo , como algo exótico, algo a exhibir y de lo que presumir. Un día la lata desaparece y eso desata una enemistad entre las dos familias con la que Lea sufrirá e intentará restablecer con picardía infantil.
En 1990, como se cuenta en la segunda parte del libro, se produjo una tímida y fallida revolución de terciopelo, tras la que los comunistas no fueron derrocados, sino que retuvieron el poder. La situación fue tan grave que se convocaron nuevas elecciones que tampoco sirvieron para mucho. Continuó empeorando hasta estallar una guerra civil en 1997 que provocó el éxodo masivo de albaneses hacia Italia. Estos últimos años fueron muy duros para Lea, pierde a su madre y a su hermano, a sus amigos, y vecinos. Como escribe, “en 1990 no teníamos nada más que esperanza. En 1997 también la perdimos. El futuro era muy negro”. Finalmente también se ve abocada al desarraigo de abandonar a su abuela, a su padre y su país para buscar un futuro mejor.
Resulta enormemente interesante leer el Epílogo de la autora hoy convertida en catedrática de Teoría Política en la London School of Economics cuando contaba a sus compañeros universitarios cómo era el socialismo en Albania y percibía en ellos ciertas reticencias que ella explica en estos términos: «El socialismo de mis compañeros universitarios era claro, brillante y con futuro. El mío era confuso, sangriento y pertenecía al pasado. Y, sin embargo (…) se inspiraba en los mismos libros, en las mismas críticas a la sociedad y en los mismos personajes históricos. Pero, para mi sorpresa , lo consideraban una desafortunada coincidencia».
Ana Nava